La escasez de equipos de rescate agrava la crisis humanitaria en Myanmar tras el terremoto

Por: David Domínguez

 El reciente terremoto de magnitud 7.7 que sacudió Myanmar ha dejado al menos 2,700 muertos y 4,500 heridos, según informes recientes, la falta de equipos de rescate y suministros esenciales ha exacerbado la tragedia, especialmente en las ciudades de Sagaing y Mandalay, donde la población carece de electricidad, agua y alimentos, viéndose obligada a vivir al pie de calle.

La situación se complica aún más debido a la guerra civil en curso, que dificulta la llegada de ayuda humanitaria y la coordinación de esfuerzos de rescate, a pesar de la devastación, el conflicto armado persiste, con informes de bombardeos en áreas afectadas por el desastre.

La comunidad internacional ya ha comenzado a responder, países como China, Rusia, Malasia, Singapur e India han enviado varios equipos de rescate y asistencia humanitaria, sin embargo, las organizaciones enfrentan grandes dificultades para asistir a las víctimas debido a la escasez de suministro médicos y la obstrucción de acceso por parte del ejército.

La falta de maquinaria pesada y equipos especializados ha obligado a los rescatistas a trabajar manualmente, lo que ralentiza las labores de búsqueda y aumenta el riesgo de más pérdidas humanas, las continuas réplicas y el temor a nuevos derrumbes complican aún más las operaciones de rescate.

Este desastre subraya la urgente necesidad de fortalecer las infraestructuras de respuesta ante emergencias y garantizar el acceso sin restricciones de la ayuda humanitaria en Myanmar, especialmente en un contexto de conflicto interno que agrava las dificultades para atender a los damnificados.

Dejar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio